De tal manera
Amar, de tal manera
que las personas desnudas
de vestido, de afecto, de sueños,
de dignidades y de oportunidades,
sean cubiertas y restauradas
en su condición de hijas
de la divinidad creadora.
Amar, de tal manera
que las personas aprisionadas
por un mundo que sigue excluyendo,
marginando, discriminando, escondiendo,
arrojando a la oscuridad a quienes
viven, piensan, sienten diferente,
puedan gustar la plena libertad
de las hijas de la divinidad inclusiva.
Amar, de tal manera
que las personas con sed y hambre
de panes y de justicia,
de techo y de misericordia,
de trabajo y de abrazos,
de mañanas por descubrir
y de memorias por sanar,
se sientan acompañadas,
sostenidas y fortalecidas
en cada presente
por la divinidad compañera.
Amar, con amor total,
hasta que el día luminoso
de la salvación
abrace todas las diversidades
y bendiga todas las formas de amar,
rompa toda cadena que oprime,
derrote todas las exclusiones,
venza todo dolor y toda injusticia,
exponga todo abuso y maltrato
y ponga en evidencia cada mentira,
acabe con toda muerte,
restaure todo lo creado
y amanezca en la aurora final
del mundo nuevo.
Gerardo Oberman