La Editorial Síntesis ha publicado recientemente (febrero de 2012) la 2ª edición de La España del exilio, una obra del profesor Juan Bautista Vilar en la que se ocupa de las emigraciones políticas españolas en los siglos XIX y XX, una obra escrita con el rigor científico que caracteriza al autor que, aunque la modestia le hace afirmar que se trata de una síntesis, ofrece una amplia visión acerca de un tema complejo como es el referido a las migraciones políticas en la época que analiza.
La Editorial Síntesis ha publicado recientemente (febrero de 2012) la 2ª edición de La España del exilio, una obra del profesor Juan Bautista Vilar en la que se ocupa de las emigraciones políticas españolas en los siglos XIX y XX, una obra escrita con el rigor científico que caracteriza al autor que, aunque la modestia le hace afirmar que se trata de una síntesis, ofrece una amplia visión acerca de un tema complejo como es el referido a las migraciones políticas en la época que analiza.
La Editorial Síntesis ha publicado recientemente (febrero de 2012) la 2ª edición de La España del exilio, una obra del profesor Juan Bautista Vilar en la que se ocupa de las emigraciones políticas españolas en los siglos XIX y XX, una obra escrita con el rigor científico que caracteriza al autor que, aunque la modestia le hace afirmar que se trata de una síntesis, ofrece una amplia visión acerca de un tema complejo como es el referido a las migraciones políticas en la época que analiza.
La Editorial Síntesis ha publicado recientemente (febrero de 2012) la 2ª edición de La España del exilio, una obra del profesor Juan Bautista Vilar en la que se ocupa de las emigraciones políticas españolas en los siglos XIX y XX, una obra escrita con el rigor científico que caracteriza al autor que, aunque la modestia le hace afirmar que se trata de una síntesis, ofrece una amplia visión acerca de un tema complejo como es el referido a las migraciones políticas en la época que analiza.
Vilar une a su ya ampliamente demostrada capacidad de investigador tanto en el campo bibliográfico como en el documental, una depurada capacidad en su condición de historiador para descubrir fuentes inéditas, de tal forma que consigue que los temas que estudia se conviertan en documentos con valor primario, aunque se sirva en buena parte de legajos ya investigados por otros autores. Y éste es el caso de La España del exilio, en el que hace un recorrido por una época de España en la que, por causas diferentes, las emigraciones por motivos políticos han sido frecuentes y, en muchas ocasiones, realmente dramáticas. Su condición de profesor de Historia Contemporánea le permite contextualizar el tema objeto de investigación con precisión
Inicia el autor su relato arrancando de la Revolución francesa y el nacimiento de la España contemporánea, para ubicar a los primeros emigrados políticos, que vincula con los reinados de Calos IV y Fernando VII, una época que marca, en palabras del Vilar, el perfil histórico de España; una España que, desde entonces, se desarrolla condicionada por los acontecimientos que se producen en el país fronterizo al norte de la península y al que miran los proscritos políticos como lugar de refugio en tiempos de persecución, cuando no son desterrados directamente por la fuerzas políticas. El período de 1804 a 1814 adquiere una relevancia especial debido a la debilidad de los monarcas que dejan el gobierno del país en manos de los validos, que terminará conduciendo al rey al destierro. La política personalista y represiva de Fernando VII, que produjo fuertes convulsiones políticas, unido a la inestabilidad y consecuencias de la guerra de la Independencia, es otro período de inseguridad y migración de españoles. Vilar desbroza con maestría este complejo período de la historia de España.
No podía pasar por alto el autor una referencia a los “afrancesados”, españoles que ya desde el siglo XVIII se sentían atraídos por la cultura francesa, término que cobra fuerza a finales de la guerra de la Independencia para designar a aquellos cortesanos que buscaban, o habían buscado, medrar a la sombra del poder; anteriormente fueron motejados con otros epítetos. Esa disquisición literaria sirve para que Vilar nos introduzca en las entretelas de la época bajo dominio francés y la quiebra ideológica que la situación produjo en la sociedad española, para centrarse en el exilio de españoles a Francia, que para algunos fue definitivo, aun superadas las causas que provocaron la emigración, aterrados muchos por la cicatería con que fueron tratados en el país de origen, amoldados otros a las nuevas circunstancias de vida, o bien porque cuando las circunstancias políticas de España pudieron ser propicias, ya habían fallecido lejos de la patria.
Siguiendo las pistas de los emigrados, no ya solamente al país del norte, sino a Bélgica, Gran Bretaña, como principal polo de atracción de los cuadros dirigentes, Portugal, Italia y, significativamente, al norte de África, sin olvidar los Estados Unidos e Iberoamérica, Vilar continúa su recorrido por la historia de España, analizando la época liberal, en la que, entre otros referentes, se detiene en presentar de forma exhaustiva y meticulosa, la figura de José María Blanco White al que define como un emigrado singular; lo fue, sin duda, dada su condición de eximio valor tanto de la literatura inglesa como española de su tiempo, analista profundo de la situación de España y, en el plano religioso, por su adscripción desde el catolicismo a la fe anglicana primero y al unitarismo más tarde, para terminar, si no formalmente, sí muy próximo al agnosticismo. Continúa recorriendo la época isabelina, el sexenio revolucionario y la Restauración para llegar hasta la II República, que culmina con la emigración de la familia real española.
Capítulo aparte merece la emigración surgida como consecuencia de la guerra civil de 1936 a 1939 y la producida por la instauración de la dictadura franquista, cuyos efectos no se cerrarían hasta la proclamación de la democracia en España, una ver muerto Franco.
El libro cuenta con un amplio repertorio documental así como una exhaustiva bibliografía y folletos coetáneos (en torno a los mil quinientos títulos en total), sistemáticamente clasificados, que contribuye a hacer de la obra un documento imprescindible para conocer y profundizar en el exilio español, en un marco histórico escrupulosamente trazado por Juan Bautista Vilar, un autor que nos tiene acostumbrados al rigor y a la excelencia historiográfica.
Mayo de 2012
Máximo García Ruiz
- La España del Exilio
- Editorial Síntesis
- 503 páginas (15 x 23 cmts.)
- Febrero 2012
- Autor: Juan Bta. Vilar
Vilar une a su ya ampliamente demostrada capacidad de investigador tanto en el campo bibliográfico como en el documental, una depurada capacidad en su condición de historiador para descubrir fuentes inéditas, de tal forma que consigue que los temas que estudia se conviertan en documentos con valor primario, aunque se sirva en buena parte de legajos ya investigados por otros autores. Y éste es el caso de La España del exilio, en el que hace un recorrido por una época de España en la que, por causas diferentes, las emigraciones por motivos políticos han sido frecuentes y, en muchas ocasiones, realmente dramáticas. Su condición de profesor de Historia Contemporánea le permite contextualizar el tema objeto de investigación con precisión
Inicia el autor su relato arrancando de la Revolución francesa y el nacimiento de la España contemporánea, para ubicar a los primeros emigrados políticos, que vincula con los reinados de Calos IV y Fernando VII, una época que marca, en palabras del Vilar, el perfil histórico de España; una España que, desde entonces, se desarrolla condicionada por los acontecimientos que se producen en el país fronterizo al norte de la península y al que miran los proscritos políticos como lugar de refugio en tiempos de persecución, cuando no son desterrados directamente por la fuerzas políticas. El período de 1804 a 1814 adquiere una relevancia especial debido a la debilidad de los monarcas que dejan el gobierno del país en manos de los validos, que terminará conduciendo al rey al destierro. La política personalista y represiva de Fernando VII, que produjo fuertes convulsiones políticas, unido a la inestabilidad y consecuencias de la guerra de la Independencia, es otro período de inseguridad y migración de españoles. Vilar desbroza con maestría este complejo período de la historia de España.
No podía pasar por alto el autor una referencia a los “afrancesados”, españoles que ya desde el siglo XVIII se sentían atraídos por la cultura francesa, término que cobra fuerza a finales de la guerra de la Independencia para designar a aquellos cortesanos que buscaban, o habían buscado, medrar a la sombra del poder; anteriormente fueron motejados con otros epítetos. Esa disquisición literaria sirve para que Vilar nos introduzca en las entretelas de la época bajo dominio francés y la quiebra ideológica que la situación produjo en la sociedad española, para centrarse en el exilio de españoles a Francia, que para algunos fue definitivo, aun superadas las causas que provocaron la emigración, aterrados muchos por la cicatería con que fueron tratados en el país de origen, amoldados otros a las nuevas circunstancias de vida, o bien porque cuando las circunstancias políticas de España pudieron ser propicias, ya habían fallecido lejos de la patria.
Siguiendo las pistas de los emigrados, no ya solamente al país del norte, sino a Bélgica, Gran Bretaña, como principal polo de atracción de los cuadros dirigentes, Portugal, Italia y, significativamente, al norte de África, sin olvidar los Estados Unidos e Iberoamérica, Vilar continúa su recorrido por la historia de España, analizando la época liberal, en la que, entre otros referentes, se detiene en presentar de forma exhaustiva y meticulosa, la figura de José María Blanco White al que define como un emigrado singular; lo fue, sin duda, dada su condición de eximio valor tanto de la literatura inglesa como española de su tiempo, analista profundo de la situación de España y, en el plano religioso, por su adscripción desde el catolicismo a la fe anglicana primero y al unitarismo más tarde, para terminar, si no formalmente, sí muy próximo al agnosticismo. Continúa recorriendo la época isabelina, el sexenio revolucionario y la Restauración para llegar hasta la II República, que culmina con la emigración de la familia real española.
Capítulo aparte merece la emigración surgida como consecuencia de la guerra civil de 1936 a 1939 y la producida por la instauración de la dictadura franquista, cuyos efectos no se cerrarían hasta la proclamación de la democracia en España, una ver muerto Franco.
El libro cuenta con un amplio repertorio documental así como una exhaustiva bibliografía y folletos coetáneos (en torno a los mil quinientos títulos en total), sistemáticamente clasificados, que contribuye a hacer de la obra un documento imprescindible para conocer y profundizar en el exilio español, en un marco histórico escrupulosamente trazado por Juan Bautista Vilar, un autor que nos tiene acostumbrados al rigor y a la excelencia historiográfica.
Mayo de 2012
Máximo García Ruiz
- La España del Exilio
- Editorial Síntesis
- 503 páginas (15 x 23 cmts.)
- Febrero 2012
- Autor: Juan Bta. Vilar
Vilar une a su ya ampliamente demostrada capacidad de investigador tanto en el campo bibliográfico como en el documental, una depurada capacidad en su condición de historiador para descubrir fuentes inéditas, de tal forma que consigue que los temas que estudia se conviertan en documentos con valor primario, aunque se sirva en buena parte de legajos ya investigados por otros autores. Y éste es el caso de La España del exilio, en el que hace un recorrido por una época de España en la que, por causas diferentes, las emigraciones por motivos políticos han sido frecuentes y, en muchas ocasiones, realmente dramáticas. Su condición de profesor de Historia Contemporánea le permite contextualizar el tema objeto de investigación con precisión
Inicia el autor su relato arrancando de la Revolución francesa y el nacimiento de la España contemporánea, para ubicar a los primeros emigrados políticos, que vincula con los reinados de Calos IV y Fernando VII, una época que marca, en palabras del Vilar, el perfil histórico de España; una España que, desde entonces, se desarrolla condicionada por los acontecimientos que se producen en el país fronterizo al norte de la península y al que miran los proscritos políticos como lugar de refugio en tiempos de persecución, cuando no son desterrados directamente por la fuerzas políticas. El período de 1804 a 1814 adquiere una relevancia especial debido a la debilidad de los monarcas que dejan el gobierno del país en manos de los validos, que terminará conduciendo al rey al destierro. La política personalista y represiva de Fernando VII, que produjo fuertes convulsiones políticas, unido a la inestabilidad y consecuencias de la guerra de la Independencia, es otro período de inseguridad y migración de españoles. Vilar desbroza con maestría este complejo período de la historia de España.
No podía pasar por alto el autor una referencia a los “afrancesados”, españoles que ya desde el siglo XVIII se sentían atraídos por la cultura francesa, término que cobra fuerza a finales de la guerra de la Independencia para designar a aquellos cortesanos que buscaban, o habían buscado, medrar a la sombra del poder; anteriormente fueron motejados con otros epítetos. Esa disquisición literaria sirve para que Vilar nos introduzca en las entretelas de la época bajo dominio francés y la quiebra ideológica que la situación produjo en la sociedad española, para centrarse en el exilio de españoles a Francia, que para algunos fue definitivo, aun superadas las causas que provocaron la emigración, aterrados muchos por la cicatería con que fueron tratados en el país de origen, amoldados otros a las nuevas circunstancias de vida, o bien porque cuando las circunstancias políticas de España pudieron ser propicias, ya habían fallecido lejos de la patria.
Siguiendo las pistas de los emigrados, no ya solamente al país del norte, sino a Bélgica, Gran Bretaña, como principal polo de atracción de los cuadros dirigentes, Portugal, Italia y, significativamente, al norte de África, sin olvidar los Estados Unidos e Iberoamérica, Vilar continúa su recorrido por la historia de España, analizando la época liberal, en la que, entre otros referentes, se detiene en presentar de forma exhaustiva y meticulosa, la figura de José María Blanco White al que define como un emigrado singular; lo fue, sin duda, dada su condición de eximio valor tanto de la literatura inglesa como española de su tiempo, analista profundo de la situación de España y, en el plano religioso, por su adscripción desde el catolicismo a la fe anglicana primero y al unitarismo más tarde, para terminar, si no formalmente, sí muy próximo al agnosticismo. Continúa recorriendo la época isabelina, el sexenio revolucionario y la Restauración para llegar hasta la II República, que culmina con la emigración de la familia real española.
Capítulo aparte merece la emigración surgida como consecuencia de la guerra civil de 1936 a 1939 y la producida por la instauración de la dictadura franquista, cuyos efectos no se cerrarían hasta la proclamación de la democracia en España, una ver muerto Franco.
El libro cuenta con un amplio repertorio documental así como una exhaustiva bibliografía y folletos coetáneos (en torno a los mil quinientos títulos en total), sistemáticamente clasificados, que contribuye a hacer de la obra un documento imprescindible para conocer y profundizar en el exilio español, en un marco histórico escrupulosamente trazado por Juan Bautista Vilar, un autor que nos tiene acostumbrados al rigor y a la excelencia historiográfica.
Mayo de 2012
Máximo García Ruiz
- La España del Exilio
- Editorial Síntesis
- 503 páginas (15 x 23 cmts.)
- Febrero 2012
- Autor: Juan Bta. Vilar
Vilar une a su ya ampliamente demostrada capacidad de investigador tanto en el campo bibliográfico como en el documental, una depurada capacidad en su condición de historiador para descubrir fuentes inéditas, de tal forma que consigue que los temas que estudia se conviertan en documentos con valor primario, aunque se sirva en buena parte de legajos ya investigados por otros autores. Y éste es el caso de La España del exilio, en el que hace un recorrido por una época de España en la que, por causas diferentes, las emigraciones por motivos políticos han sido frecuentes y, en muchas ocasiones, realmente dramáticas. Su condición de profesor de Historia Contemporánea le permite contextualizar el tema objeto de investigación con precisión
Inicia el autor su relato arrancando de la Revolución francesa y el nacimiento de la España contemporánea, para ubicar a los primeros emigrados políticos, que vincula con los reinados de Calos IV y Fernando VII, una época que marca, en palabras del Vilar, el perfil histórico de España; una España que, desde entonces, se desarrolla condicionada por los acontecimientos que se producen en el país fronterizo al norte de la península y al que miran los proscritos políticos como lugar de refugio en tiempos de persecución, cuando no son desterrados directamente por la fuerzas políticas. El período de 1804 a 1814 adquiere una relevancia especial debido a la debilidad de los monarcas que dejan el gobierno del país en manos de los validos, que terminará conduciendo al rey al destierro. La política personalista y represiva de Fernando VII, que produjo fuertes convulsiones políticas, unido a la inestabilidad y consecuencias de la guerra de la Independencia, es otro período de inseguridad y migración de españoles. Vilar desbroza con maestría este complejo período de la historia de España.
No podía pasar por alto el autor una referencia a los “afrancesados”, españoles que ya desde el siglo XVIII se sentían atraídos por la cultura francesa, término que cobra fuerza a finales de la guerra de la Independencia para designar a aquellos cortesanos que buscaban, o habían buscado, medrar a la sombra del poder; anteriormente fueron motejados con otros epítetos. Esa disquisición literaria sirve para que Vilar nos introduzca en las entretelas de la época bajo dominio francés y la quiebra ideológica que la situación produjo en la sociedad española, para centrarse en el exilio de españoles a Francia, que para algunos fue definitivo, aun superadas las causas que provocaron la emigración, aterrados muchos por la cicatería con que fueron tratados en el país de origen, amoldados otros a las nuevas circunstancias de vida, o bien porque cuando las circunstancias políticas de España pudieron ser propicias, ya habían fallecido lejos de la patria.
Siguiendo las pistas de los emigrados, no ya solamente al país del norte, sino a Bélgica, Gran Bretaña, como principal polo de atracción de los cuadros dirigentes, Portugal, Italia y, significativamente, al norte de África, sin olvidar los Estados Unidos e Iberoamérica, Vilar continúa su recorrido por la historia de España, analizando la época liberal, en la que, entre otros referentes, se detiene en presentar de forma exhaustiva y meticulosa, la figura de José María Blanco White al que define como un emigrado singular; lo fue, sin duda, dada su condición de eximio valor tanto de la literatura inglesa como española de su tiempo, analista profundo de la situación de España y, en el plano religioso, por su adscripción desde el catolicismo a la fe anglicana primero y al unitarismo más tarde, para terminar, si no formalmente, sí muy próximo al agnosticismo. Continúa recorriendo la época isabelina, el sexenio revolucionario y la Restauración para llegar hasta la II República, que culmina con la emigración de la familia real española.
Capítulo aparte merece la emigración surgida como consecuencia de la guerra civil de 1936 a 1939 y la producida por la instauración de la dictadura franquista, cuyos efectos no se cerrarían hasta la proclamación de la democracia en España, una ver muerto Franco.
El libro cuenta con un amplio repertorio documental así como una exhaustiva bibliografía y folletos coetáneos (en torno a los mil quinientos títulos en total), sistemáticamente clasificados, que contribuye a hacer de la obra un documento imprescindible para conocer y profundizar en el exilio español, en un marco histórico escrupulosamente trazado por Juan Bautista Vilar, un autor que nos tiene acostumbrados al rigor y a la excelencia historiográfica.
Mayo de 2012
Máximo García Ruiz
- La España del Exilio
- Editorial Síntesis
- 503 páginas (15 x 23 cmts.)
- Febrero 2012
- Autor: Juan Bta. Vilar